¿Qué estrategias utilizas para facilitar la comunicación y romper las posibles resistencias que puedan mostrar los deportistas hacia la figura del psicólogo?
Creo que las resistencias se deben a expectativas negativas respecto a lo que hace el psicólogo del deporte (¡a veces basadas en experiencias negativas!). Mi enfoque es no presionar a nadie, pero estar presente y si surge la oportunidad aprovecharla, pero sin forzar. Por ejemplo, en los viajes me siento siempre en una mesa diferente y no hablo de psicología a no ser que me pregunten. Igual con el asiento en los autocares, aviones, etc. Entiendo que no todo el mundo necesita hablar o consultar conmigo y respeto igual a esos deportistas. Si es posible me parece útil dar una charla general al principio explicando lo que puedo hacer, y suelo introducirlo preguntando: ¿Rindes (rendís) consistentemente al nivel del que eres (sois) capaz física y técnicamente? Si no es así, y no hay una lesión que lo explique, ¿cuál es la razón? Para mí la psicología del deporte no hace buenos a los que no lo son o no entrenan, pero te puede dar algo muy importante: consistencia. En mi trabajo se necesita que confíen en ti, y esa confianza hay que ganársela, no se obtiene por tener un titulo; por ello he aprendido a tener paciencia.